15 DE ENERO DE 1979. AZPEITIA (GUIPÚZCOA) GUARDIA CIVIL FRANCISCO MOTA CALVO.
Guardia Civil Francisco Mota Calvo.
El 15 de enero de 1979, dos días después del doble atentado de Azpeitia que costó la vida a los Guardias Civiles Francisco Gómez Gómez-Jiménez y a Miguel García Poyo, fallecía el Guardia Civil FRANCISCO MOTA CALVO. Lo hacía a las cinco y media de la tarde en la Residencia Nuestra Señora de Aránzazu de San Sebastián, al no poder superar las gravísimas heridas recibidas en el pecho, además de la amputación de su pierna izquierda tras la explosión de un paquete bomba , que junto a su compañero Miguel García Poyo, fallecido en el acto, intentaban desactivar.
Con un desgarrador grito de “Viva mi marido, que ha sido muy valiente”, dado por la viuda del guardia civil Francisco Mota, finalizaba el funeral por el alma del miembro de la Benemérita, celebrado al día siguiente en el hospital militar de San Sebastián y al que asistieron la viuda y familiares, junto a las primeras autoridades civiles y militares, jefes y oficiales de la Guardia Civil y Policía Nacional, así como numerosos compañeros.
Terminado el funeral, el féretro de Francisco Mota, envuelto en la bandera nacional, fue sacado a hombros de compañeros hasta un furgón funerario. Antes de introducirlo se entonó el himno de la Guardia Civil, dándose posteriormente numerosos vivas a España, a la Guardia Civil y gritos contra Eta y el gobierno. Tras ello el furgón inició su marcha en dirección a la localidad palentina de Frechilla, donde sería cristianamente sepultado. Cuando el gobernador civil abandonaba el hospital militar varias mujeres le increparon con dureza
Por este atentado fueron condenados en 1995 los miembros de ETA Mercedes Galdós Arsuaga y Félix Ramón Gil Ostoaga a 29 años por la muerte de los tres agentes de la Guardia Civil, y a otros 22 años por el asesinato frustrado de Juan Muñiz Sánchez.
En octubre de 2002 Gil Ostoaga salió en libertad. Sin embargo, un mes después de su puesta en libertad, apareció muerto con un disparo en el pecho en una campa de su localidad natal, Legazpia (Guipúzcoa), junto a una escopeta propiedad de su hermano.
En septiembre de 2005, la etarra Mercedes Galdós Arzuaga, la mujer que más atentados criminales ha cometido por orden de la banda, quedaba en libertad tras cumplir 19 años del límite máximo de 30 de cumplimiento efectivo de condena. Había ingresado en prisión el 9 de abril de 1986. Redimió de su condena más de 10 años gracias a sus estudios de pedagogía y sus actividades de limpieza, aerobic, mecanografía o fútbol sala. Galdós, fue condenada a 829 años de prisión, por su implicación directa en 17 asesinatos cometidos desde 1977.
Francisco Mota Calvo, de 29 años, era natural de la población palentina de Frechilla Estaba casado y tenía dos hijos
De acuerdo con el Real Decreto 1404/2000, con fecha 19 de julio de 2000, se les concedió la Gran Cruz de la Real Orden de Reconocimiento Civil a las Víctimas del Terrorismo a título póstumo. Además, en resolución fechada el 18 de marzo de 2005 (Real Decreto 308/2005), el Ministerio del Interior les concedió también el ascenso de empleo, con carácter honorífico y a título póstumo.
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