15 DE SEPTIEMBRE DE 1974. BILBAO. GUARDIA CIVIL MARTÍN DURAN GRANDE.
Guardia Civil Martín Durán Grande.
El 15 de septiembre de 1974, al no poder superar las graves heridas recibidas en un enfrentamiento con elementos de la banda terrorista, separatista, marxista y antiespañola ETA, en una calle de Bilbao, el 11 de septiembre, fallecía en el Hospital Militar de Bilbao el Guardia Civil MARTÍN DURAN GRANDE.
La operación de la Guardia Civil se había iniciado alrededor de las diez y media de la noche del 10 de septiembre, con un enfrentamiento entre fuerzas de la Benemérita y un comando' de la organización ETA, en las proximidades de la Isla de los Faisanes, término municipal de Irún, donde se encuentra la frontera entre Irún y Hendaya (Francia).
La Guardia Civil, que patrullaba por la zona, observó movimientos extraños y creyendo que podría tratarse de contrabando estuvo a la expectativa.
Poco después cruzó el Bidasoa una barca con varias personas a bordo, mientras en la orilla española surgió de un automóvil un individuo joven y corpulento con la intención de llegar hasta ellas para entrar en Francia clandestinamente.
La Guardia Civil intentó detenerle, pero el individuo en cuestión, que resultaría ser el etarra Vicente Gurruchaga Escenarro, abrió fuego y emprendió la huida hacia un monte cercano, donde más tarde pudo ser detenido. Mientras huía, otros tres ocupantes del automóvil hicieron fuego contra la fuerza, que se vio obligada a responder. Aprovechando la confusión, los ocupantes de la barca consiguieron huir, cruzando nuevamente la frontera franco-española.
El detenido Vicente Gurruchaga Ecenarro, era un conocido miembro del frente militar de ETA. V Asamblea, natural de Placencia de las Armas, Guipúzcoa, nacido el 7 de' septiembre de 1947, soltero, sin domicilio conocido, mecánico tornero y que llevaba residiendo desde hacía siete meses en Hendaya como refugiado político.
Le fue ocupada una pistola marca «Parabelíum Firebird» de 9 m/m. y dos cargadores para la misma, con la correspondiente dotación de munición. Igualmente le fueron ocupadas 22.400 pesetas en dinero efectivo y un juego de llaves del automóvil que fue abandonado, un Renault -8 matricula de San Sebastián, robado a un vecino de Oyarzun; en el interior del vehículo fueron descubiertas 39.000 pesetas y 500 francos nuevos, así como abundante propaganda y pasaportes falsificados, uno de ellos en su poder, haciéndose llamar Luis Miguel Manarriz López.
Como consecuencia de la detención de Vicente Gurruchaga Ecenarro, y tras su declaración en la cual confesó ente otros asuntos, ser el autor de la colocación de dos artefactos en la Casa sindical de Placencia de las Armas y otro en Villafranca de Ordicia. Estaba en la frontera a la espera de que le recogieran para volver a Francia con el comando.
Con esa información se montó en las horas siguientes, en distintos puntos de Vascongadas, un servicio de vigilancia, localizándose un piso en el número 59 de la calle Doctor Areilza, de Bilbao, que la Guardia Civil sospechaba que podría estar siendo utilizado por miembros de ETA.
El día 11 de septiembre, por la mañana, efectivos de la Guardia Civil entraron en el sexto piso y detuvieron a la etarra María Dolores González Cataraín, alias “Yoyes”, de 18 años de edad, que portaba en un bolso una pistola Firebird, 9 milímetros parabellum, con dos cargadores. Doce años más tarde de aquella detención, Yoyes sería asesinada por sus excompañeros de la banda etarra.
Tras ser trasladada a la Comandancia de la Guardia Civil, se mantuvo en dicho piso el servicio de vigilancia. Poco después de las 13,30 se personaron en él dos jóvenes que, al ser sorprendidos por la presencia de efectivos del instituto Armado, iniciaron un tiroteo, también con pistolas marca “Firebird”. Uno de los terroristas, José Antonio Inchaustegui Elizondo, alias “El Duque”, fue detenido, mientras que el otro, que resultaría ser Juan José Urcelay Imaz, huyó escaleras abajo perseguido por el Guardia Civil, vestido de paisano, Martín Durán Grande, que recibió dos disparos por parte del etarra: uno en el vientre y otro en la pierna izquierda.
En su huida, el activista de ETA se introdujo en el segundo piso de la casa, donde se encontraba una señora de unos setenta años de edad, con su hija, de 24 años. Allí el etarra amenazándolas, dijo: “Soy de la ETA y me está persiguiendo la Policía. Tienen que ayudarme”. Al ver la altura considerable desde el balcón a la calle desistió de lanzarse a ella y huyó del lugar. La dueña de la casa María Cruz Gómez Segura, muy asustada salió al balcón y pidió auxilio a gritos. Urcelay continuaría con su huida y, pensando que podría haber guardias en el portal del edificio, salió a la calle dando tiros. Uno de los disparos hirió en el glúteo a una transeúnte, Andrea Villamore Silva, de 58 años y natural de Touro (La Coruña). Martín Durán Grande, pese a estar gravemente herido, continuó la persecución de Urcelay Imaz, desplomándose en el suelo nada más salir a la calle, donde fue atendido por los propietarios de un bar cercano.
Horas más tarde, la Guardia Civil localizaba otro piso de la banda en el barrio de Zorroza de Bilbao, en la calle Astillero nº 6, donde sospechaban que se había escondido el presunto autor de los disparos que hirieron a Martín Durán, Juan José Urcelay Imaz. Cuando intentaron detenerlo se entabló otro tiroteo en el que Urcelay Imaz resultó muerto. Además, un segundo etarra y otros dos guardias civiles -Aniceto Reguero Fernández y Manuel Vera Ortiz- resultaron heridos de diversa consideración.
En la operación se detuvo también a Purificación Martínez Setién e Ignacio Setién. Urcelay llevaba encima un carnet de identidad falso, a nombre de Germán Saez Anguiauo, nacido en octubre de 1949 y natural de Bilbao. También fue detenido Javier Santos Mugía, de 22 años, soltero, natural de Placencia (Guipúzcoa) y vecino de Bilbao, Cumplia el servicio Militar en el regimiento de Infantería de Garellano de la capital vasca.
Todos aquellos etarras detenidos se verían beneficiado por la impresentable, injusta e ignominiosa amnistía, decretada en 1977 por el gobierno que presidia Adolfo Suárez.
Martín Durán Grande tenía 21 años cuando fue asesinado por la banda terrorista ETA. Había nacido en Portugalete, en la margen izquierda de la ría del Nervión, pero vivía en Erandio, en la orilla derecha. El mismo 15 de septiembre se celebró el funeral en la Iglesia de San Agustín de Erandio. El Gobernador civil de Vizcaya colocó sobre el féretro la Medalla al Mérito Policial, con distintivo rojo, a título póstumo.
El funeral estuvo presidido por el subdirector de la Guardia Civil, general Salvador Bujanda González; gobernadores civil y Militar de Vizcaya y otras autoridades civiles y militares, así como los familiares del Guardia civil fallecido. En las calles próximas a la iglesia se llenaron de ciudadanos, Ofició el funeral el capellán castrense Jesús Arragúas que subrayó en su homilía que Martina Durán había muerto al servicio de la Patria y en defensa de los españoles.
Una vez finalizada la Misa, a la salida del templo un gran número de asistentes al oficio religioso entonó el “Cara al Sol” dando posteriormente gritos de “muerte a ETA” “La Eta al paredón” “Asesinos” si como constantes Vivas a España, a Franco, a la Guardia Civil, la Policía Armada y el Ejercito. Centenares de personas se dirigieron por diversas calles de Bilbao hasta el Gobierno Civil donde volvieron a entonar el “Cara al Sol” .
Unos días después del entierro de Martín Durán, el presidente de la Diputación de Vizcaya, Pedro Arístegui, propuso la concesión de la Medalla de Plata de la Provincia para el policía municipal Eloy García Cambra, asesinado el 29 de agosto de 1972 en Galdácano, y para el guardia civil Martín Durán Grande.
De acuerdo con el Real Decreto 1404/2000, con fecha 19 de julio de 2000, se le concedió la Gran Cruz de la Real Orden de Reconocimiento Civil a las Víctimas del Terrorismo a título póstumo. Además, en resolución fechada el 18 de marzo de 2005 (Real Decreto 308/2005), el Ministerio del Interior les concedía también el ascenso de empleo, con carácter honorífico y a título póstumo.
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