16 DE MAYO DE 1980 ARRONA (GUIPÚZCOA) CEFERINO PEÑA ZUBÍA, PROPIETARIO DE UN TALLER.
Ceferino Peña Zubía.
En torno a las ocho y media de la tarde del 16 de mayo de 1980, tres miembros de la banda terrorista ETA, encapuchados, asesinaban en la localidad guipuzcoana de Arrona a CEFERINO PEÑA ZUBÍA, propietario de un taller de carrocería. En el instante del atentado Ceferino conversaba con un cliente al que atendía en la puerta del establecimiento. Los tres terroristas, tras apartar violentamente al cliente, abrieron fuego contra Ceferino Peña, alcanzándole varios disparos en la boca, el pecho y el vientre, que le provocaría la muerte casi instantánea. Ceferino, con un hilo de vida, fue urgentemente trasladado en un coche hasta el puesto de la Cruz Roja de Zumaya, donde certificaron su muerte. Los etarras huyeron en un Seat 1430 Coupé, que había sido previamente robado en Zaráuz a punta de pistola.
Con el asesinato de Ceferino Peña, la banda marxista y antiespañola cometió un error de bulto, al confundir a Ceferino con otro industrial de Arrona, que era el verdadero objetivo a asesinar por la banda. Los miembros del comando, tras seguir de forma errónea a Ceferino, lo asesinaron equivocadamente, como tuvo que reconocer la banda en un comunicado enviado a los medios de información.
En 1982, la Audiencia Nacional condenó a cuatro de los cinco integrantes del comando que asesinó a Ceferino Peña. Teodoro Izaguirre Iglesias a 27 años de prisión, como autor material del asesinato. A 20 años de cárcel a Luis María Careaga Urquizo como coautor y cooperador. José Ramón Irusta Urain, recibió 12 años de condena como cómplice y Juan Lucha Garcia, seis como conspirador.
En octubre de 2000, la Audiencia Nacional condenaría también como autor material del asesinato de Ceferino Peña, el etarra José Antonio Galarraga Arrona a 27 años de reclusión mayor.
A principios de los años 2000, Luis María Careaga Urquizu, salió en libertad de la cárcel de Soria.
En 2003, tras ser condenado a cuarenta y cuatro años de prisión, Teodoro Izaguirre Iglesias, salió en libertad, tras 22 años de reclusión.
En junio de 2018, José Antonio Galarraga Arrona, quedaba en libertad, tras cumplir 18 años de los 37, a los que fue condenado0 por el asesinato de Ceferino Peña.
Ceferino Peña Zubía, de 30 años, estaba casado y tenía una hija de tres años. Vecinos de Arrona comentaron que Ceferino Peña había residido toda su vida en Arrona y que, tanto él como su familia, eran muy queridos en el pueblo. No se le conocían ideas políticas definidas y no estaba afiliado a ninguna organización.
De acuerdo con el Real Decreto 1404/2000, con fecha 19 de julio de 2000, se le concedió la Gran Cruz de la Real Orden de Reconocimiento Civil a las Víctimas del Terrorismo a título póstumo
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