18 DE OCTUBRE DE 1975. ZARAUZ (GUIPÚZCOA). GUARDIA CIVIL MANUEL LÓPEZ TREVIÑO.
Guardia Civil Manuel López Treviño.
Sobre las ocho de la tarde de 18 de octubre de 1975, el Guardia Civil MANUEL LÓPEZ TREVIÑO, vestido de paisano, se dirigía desde el cuartel del instituto Armado en la localidad guipuzcoana de Zarauz hacia su domicilio, fue tiroteado por varios miembros de un comando de ETA, que le esperaban, recibiendo una ráfaga de metralleta, a traición y por la espalda, de la cual, tras caer al suelo f,allecería de forma instantánea. Una vez cometido el atentado los pistoleros etarras abandonarían el lugar en un vehículo. .
López Treviño fue socorrido por una monja del asilo de la Misericordia, muy próximo al lugar del atentado, que comprobó que había fallecido, al igual que un médico que certificaría su muerte. Uno de los primeros en darse con el cadáver de Manuel López Treviño, por casualidad, fue uno de sus hijos, que en esos instantes alarmado por el revuelo de gente se acercó, en compañía de su novia, con la que estaba dando paseo, comprobando que el asesinado era su propio padre. Una vez el juez ordenó el levantamiento del cadáver, compañeros de la Guardia Civil trasladaron el mismo al cuartel de Zarauz donde quedaría instalada la capilla ardiente.
El director general de la Guardia Civil, teniente general Ángel Campano López, presidía Zarauz la misa de «córpore insepulto» por el alma de Manuel López Treviño. El funeral se celebró en la iglesia parroquial de Santa María la Real de Zarauz. Al teniente general Campano le acompañaban los gobernadores civil y militar, general, jefe de la V Zona de la Guardia Civil, autoridades provinciales y locales, así como numerosas representaciones. El templo se encontraba completamente lleno de asistentes. La misa fue oficiada por el párroco, José María Astigarraga.
Poco antes de las seis de la tarde, los restos mortales de Manuel López Treviño fueron llevados desde la capilla ardiente hasta el templo, a hombros de compañeros del Cuerpo. El féretro iba cubierto con la bandera nacional y fue escoltado en el presbiterio par seis guardias civiles.
En su homilía, el párroco de Santa María la Real dirigió frases de consuelo hacia los familiares, y condenó- como cristiano todo acto violento y más cuando lleva consigo el derramamiento de sangre. Mencionó igualmente la exhortación del obispo de la diócesis para trabajar todos en la tarea de la paz.
Terminada la ceremonia religiosa, en el atrio del templo se dio lectura al decreto del Ministerio de la Gobernación otorgando la medalla al mérito policial, y del Ministerio del Ejército concediendo la del mérito militar. Ambas distinciones fueran impuestas sobre el féretro del Guardia Civil asesinado por el Teniente General Campano.
Seguidamente el Director General de la Guardia Civil tomó la palabra añadiendo que él era el último miembro llegado al Benemérito Instituto y que en esos momentos sentía el dolor de toda la Guardia Civil, Cuerpo al que la víctima se dio con entrega desde su ingreso, hasta dar su vida. “Aún recuerdo” -dijo- “las palabras pronunciadas ayer, pidiendo orden, convivencia y economía de sangre, para que no se vertiese nada más que la que Dios exigiera. Por lo visto, la de Manuel López Treviño la ha pedido y la ha entregado éste con abnegación. Ojalá ésta sea la última sangre vertida en nuestra querida España".
A continuación se entonó el «Cara al Sol», y por el gobernador Civil de la provincia se dieron los gritos de ritual. Finalmente, el cadáver de Manuel López Treviño fue cristianamente sepultado en el cementerio de la localidad guipuzcoana.
El 21 de octubre, la banda terrorista ETA asumió mediante un comunicado dado en Biarritz el asesinato de López Treviño. En abril de 1976 agentes del Cuerpo General de Policía de Bilbao desarticulaban en una brillante operación, varios grupos de ETA Asamblea político militar. Uno de los detenidos era Jacques Velasco Arteche, que pasó información sobre los movimientos y hábitos de Manuel López Treviño a Francisco Javier Olazábal. Según las investigaciones llevadas a cabo por la Guardia Civil, uno de los autores materiales del asesinato de López Treviño fue Ignacio Gabirondo Agote, alias Donibane, que falleció el 13 de julio de 1980 en el intercambio de disparos que se produjo después de que los etarras tendieran una emboscada contra un convoy de la Guardia Civil que acabó con la vida de los miembros del Benemérito Cuerpo Antonio Gómez Ramos y Aurelio Navío Navío. Otro participante en el asesinato de Manuel López Treviño, según las pesquisas realizadas por la Guardia Civil, fue José Agustín Achega Aguirre, alias Fiti. Detenido en 1983, varios de los delitos que habían cometido, entre ellos el asesinato de López Treviño, habían sido amnistiados por la malvada e incompresible amnistía de octubre de 1977, llevada a cabo por el infame gobierno de Adolfo Suárez.
.
Manuel López Treviño, de 48 años, era natural de Monterrubio de la Serena (Badajoz), Estaba casado y tenía seis hijos. Desde 1953 estaba adscrito al puesto de la Benemérita de Zarauz.
De acuerdo con el Real Decreto 1404/2000, con fecha 19 de julio de 2000, se le concedió la Gran Cruz de la Real Orden de Reconocimiento Civil a las Víctimas del Terrorismo a título póstumo. Además, en resolución fechada el 18 de marzo de 2005 (Real Decreto 308/2005), el Ministerio del Interior le concedía también el ascenso de empleo, con carácter honorífico y a título póstumo.
El asesinato del Guardia Civil Manuel López Treviño nunca fue juzgado.
Comments