21 DE DICIEMBRE DE 1978. MADRID. BENJAMÍN DIEZ GONZÁLEZ. POLICÍA MUNICIPAL.
Benjamín Díaz González. Policía Municipal de Madrid.
En la mañana del jueves 21 de diciembre de 1978, el policía municipal de Madrid BENJAMÍN DÍAZ GONZÁLEZ, de veintinueve años, casado y padre de una niña de diecisiete meses, era asesinado cuando dirigía el tráfico en la avenida de Aragón, a unos metros de la plaza de la Cruz de los Caídos de la capital de España.
El atentado contra el policía municipal fue cometido sobre las diez y media de la mañana, minutos después de que el agente muerto hubiera relevado al cabo Manuel Minguez Lago pan que éste desayunara.
Cuando el señor Díaz ya habla entrado de servicio y se hallaba en la calzada, a unos metros de la esquina con la calle de Arturo Soria, dos jóvenes —uno vestido con una gabardina y el otro con un chaquetón de color caqui- y una mujer rubia, se acercaron al agente urbano y, sin que mediara palabra, el hombre del chaquetón efectuó un disparo con una escopeta de cañones recortados que llevaba oculta de-bajo de 1a prenda de abrigo.
A pesar de que, en ese momento el semáforo de la esquina estaba en rojo y habla numerosos automóviles a la espera, ninguno de sus ocupantes impidió que los autores del disparo huyeran; el cuerpo del agente quedó boca arriba junto a un Land Rover que estaba aparcado, en tanto la dependiente de un establecimiento situado frente al lugar del homicidio vio como el autor de los disparos, su compañero y la joven rubia se dirigían hacia la esquina «sin ninguna prisa». Una vez en la esquina, los autores del atentado empujaron a una señora mayor antes de meterse en la boca de la estación de Metro de Ciudad Lineal.
Cinco personas acudieron a auxiliar a Benjamín Diez y lo introdujeron en un Renault-6, que lo trasladado urgentemente a la Ciudad Sanitaria Francisco Franco, donde Benjamín Díez ingreso cadáver. Varios de ellos aseguraron que los agresores no se habían llevado el arma del policía municipal. En la ciudad sanitaria, el doctor González Vicent, jefe del departamento de urgencias, informó que el impacto de bala, le produjo a Benjamín grandes destrozos a la altura de las primeras costillas. La muerte fue instantánea y el arma con la que le dispararon estaba cargada con postas.
En el cuartel de Conde Duque, sede de la Delegación de Seguridad y Policía Municipal, se instalaría la capilla ardiente, antes de que fuera enterrado en el cementerio de la Almudena.
Benjamín Díaz González pertenecía a la Tercera Agrupación Mixta de Circulación de la Policía Municipal, cuerpo en el que había accedido con la penúltima promoción, en el año 1976.
De acuerdo con el Real Decreto 1404/2000, con fecha 19 de julio de 2000, se le concedió la Gran Cruz de la Real Orden de Reconocimiento Civil a las Víctimas del Terrorismo a título póstumo.
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