HOY 22 DE JUNIO:ASESINADOS POR EL TERRORISMO MARXISTA. ¡ESPAÑOL RECUERDA Y NO OLVIDES!

22 DE JUNIO DE 1979. SAN SEBASTIÁN. FRANCISCO MEDINA ALBALA, ALBAÑIL.

Francisco Medina Albala.

El viernes 22 de junio de 1979, un comando terrorista de la banda ETA, asesinaba al albañil FRANCISCO MEDINA ALBALA, cuando, subido en su motocicleta, circulaba por las calles de San Sebastián.

El atentado se produjo hacia las ocho menos cuarto de la mañana. Minutos antes, Francisco Medina había salido de su domicilio, sito en el número 23 de la calle Matías, enclavada, en el barrio del Antiguo de la capital donostiarra. Como todas las mañanas, la victima utilizó su motocicleta, una «Vesplno» de color rojo, para trasladarse a los nuevos cuarteles que la Guardia Civil estaba construyendo en Inchaurrondo, en donde trabajaba.

Cuando Francisco circulaba a la altura del número 44 de la Avenida de Anetzagana y cuando se disponía a dar una curva con el propósito de coger la calle Virgen del Carmen, próxima al cementerio de Polloe. En esos momentos, un Seat -124», que previamente había adelantado a un autobús público de la línea de Eguia, sobrepasó al motorista para parar seguidamente y obstaculizarle la conducción.

Uno de los tres jóvenes ocupantes del coche, -según referiría el  conductor del autobús, que sería testigo de los hechos-, descendió del mismo y efectuó cuatro disparos de pistola. El operario de la construcción, alcanzado por tres Impactos, dos en la cabeza y uno en el costado, perdió el control de le motocicleta y cayó mortalmente herido en la carretera, quedando boca arriba y con la pierna derecha enganchada en el pedal del mismo lado.

La victima permaneció tirada en el suelo, cubierto con una manta, hasta pasadas las nueve de la mañana, hora en que se personó el juez y ordenó el levantamiento del cadáver. Hacia las nueve y cuarto, y en una ambulancia del cuarto de Socorro, el cadáver fue trasladado al depósito del cementerio de Polloe, distante unos doscientos metros, y en donde a primeras horas de la tarde se le realizó la autopsia. En el lugar de los hechos la Policía recogió cuatro casquillos 9 mm. Parabellum.

El coche utilizado por los terroristas  en el atentado, había sido  sustraído a punta de pistola a su propietario cuando éste abandonaba su domicilio, en el barrio de Gros, para dirigirse al trabajo. Según propia declaración, dos Individuos, provistos de una pistola, le obligaron a sentarse en el asiento delantero derecho, al tiempo que le señalaban que cerrara los ojos. Poco después lo abandonaron en el alto de Zuloaga, atado a un árbol y con el rostro cubierto con una capucha.

Hacia las ocho y media de la mañana, y por una llamada recibida en el diario «Egin», se tuvo conocimiento de que el propietario del coche estaba atado en el punto señalado. Desplazada una dotación de la Policía Nacional, localizó el automóvil en el paseo de Jai Alai, pero  no encontró a la víctima, ya que ésta había logrado liberarse y se encontraba camino de Comisaria de Policía, donde presentaría la denuncia. En el interior del vehículo encontraron una metralleta Sten con dos cargadores.

Los funerales por Francisco Medlna Albala, se celebraron en la parroquia de San Sebastián Mártlr, de la capital donostiarra. El cadáver de Francisco Medina, por decisión de sus padres y de su esposa, fue trasladado a Almuñécar (Granada), su pueblonatal, donde fue cristianamente sepultado.

Francisco Medina Albalá era natural de Almuñécar (Granada), tenía 33 años de edad, estaba casado y era padre de dos hijos. Estaba afiliado a la central sindical de Comisiones Obreras. Vivía en el número 23 de la calle Matías, en el barrio Antiguo de la capital donostiarra, Había estado varios meses en el seguro de desempleo antes de entrar a trabajar os trabajos en la construcción de los nuevos cuarteles de la Guardia Civil. La víctima había recibido amenazas por parte del entorno proetarra.

De acuerdo con el Real Decreto 1404/2000, con fecha 19 de julio de 2000, se le concedió la Gran Cruz de la Real Orden de Reconocimiento Civil a las Víctimas del Terrorismo a título póstumo.

A fecha de hoy, su asesinato continua impune.