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HOY 23 DE MAYO:

23 DE MAYO DE 1994. MADRID. TENIENTE DE LA ESCALA AUXILIAR DE INGENIEROS DEL EJÉRCITO DE TIERRA MIGUEL PERALTA UTRERA.


Teniente de la Escala Auxiliar de Ingenieros del Ejército de Tierra Miguel Peralta Utrera.


En la mañana del 23 de mayo de 1996, la Organización ETA, asesinaba en Madrid mediante una bomba-lapa, al Teniente de Ingenieros de la escala Auxiliar del Ejército de Tierra, MIGUEL PERALTA UTRERA. 


Miguel Peralta Utrera, falleció en el acto al hacer explosión una potente bomba adosaba a los bajos de su vehículo particular cuando circulaba por la carretera de Extremadura, poco después de dejar a una de sus hijas, de 15 años, en el instituto. Un fallo en el sistema de ignición fue la causa más probable de que el artefacto no estallase al arrancar el vehículo, sino después de que hubiera recorrido varios kilómetros.


El teniente Peralta Utrera vestía de uniforme  y había abandonado poco después de las ocho de la mañana su domicilio. Se dirigía, como todos los días, al cuartel del mando de Transmisiones, en las cercanías de Prado del Rey, donde estaba destinado.


La bomba de gran potencia  destrozó el cuerpo del Teniente, cuyos restos quedaron diseminados en la carretera, partiendo el coche en dos. Algunos trozos del vehículo quedaron esparcidos en ambos sentidos de la carretera nacional e incluso en un panel señalizador situado a más de cinco metros de altura.


La fortuna evitó que la potente deflagración afectase a otros vehículos y se registrase una tragedia mucho mayor. La detonación obligó a paralizar la circulación en ambos sentidos durante más de una hora, lo que originó importantes retenciones y colapso.


En el lugar de los hechos se personó rápidamente el  ministro de Justicia e Interior, Juan Alberto Belloch, así como el alcalde de Madrid, José María Álvarez del Manzano. Dos de los hijos del teniente asesinado también se desplazaron a la zona del atentado, donde presenciaron, absolutamente abatidos, el levantamiento del cadáver.


El funeral por el eterno descanso de su alma, tuvo lugar al día siguiente celebrado en el acuartelamiento donde estaba destinado, oficiado por el arzobispo general castrense monseñor José Manuel Estepa. Los dos hijos varones del teniente portaron el féretro de su padre, junto a oficiales de la Guardia Civil y del Ejército de Tierra. El secretario de Estado prendió la Cruz al Mérito Militar en la enseña Nacional que cubría el féretro, concedida al militar a título póstumo que, luego, entregó a la viuda y los hijos de Miguel Peralta. Sus restos mortales recibieron cristiana sepultura en la localidad gaditana de Chiclana,


En el año 2000 la Audiencia Nacional condenó a Mikel Azurmendi Peñagaricano a 36 años de reclusión mayor por el asesinato de Miguel Peralta. La sentencia se recogía textualmente “que la bomba-lapa, que mató al Teniente Peralta,  fue confeccionada por Azurmendi, Mercedes Chivite Berango y Álvaro Juan Arri Pascual. Este último la adosó a los bajos del coche con la ayuda de la etarra Idoia Martínez García”. Mikel Azurmendi admitió en ese juicio la participación también en el atentado de Arri Pascual, que sería  absuelto en 2005 por la Audiencia Nacional al carecer de pruebas suficientes para condenarlo.


Mercedes Chivite Berango fue condenada en Francia en enero de 2010, junto a su pareja Félix López de Lacalle Gauna, alias Mobutu, a 12 años como responsables de las compras internacionales de armas de la banda etarra.


En 2019, El Tribunal Administrativo de Navarra anulaba la contratación de la etarra Mercedes Chivite como funcionaria del Ayuntamiento de Ansoáin. El Tribunal  estimó el recurso interpuesto por la portavoz de UPN en Ansoáin Arancha Arias, contra el acuerdo de la Junta de Gobierno Local del Ayuntamiento de Ansoáin por el que aprobó el reingreso como funcionaria de Mercedes Chivite Berango, que ya había alcanzado su libertad.


Idoia Martínez García, alias “Alba”, una de las etarras más sanguinarias de la banda asesina, fue detenida el 6 de noviembre de 1997 en la localidad francesa de La Rochelle y extraditada a España por Francia en noviembre de 2003. En enero de 2015, la Audiencia Nacional le condenó  en un primer momento a 30 años de cárcel  por su participación en el asesinato del Teniente Peralta. Posteriormente el Tribunal Supremo  le absolvería del asesinato del Teniente Peralta.  Idoia que había pasado 23 años en la carcdel tras ser  condenada con anterioridad a 32 años de cárcel por robar sus armas a dos policías municipales de Madrid en agosto de 1994 y por los delitos de depósito de armas y tenencia de explosivos, salió en libertad en 2012.

 

Miguel Peralta Utrera tenía 47 años. Había nacido en  Medina Sidonia (Cádiz), estaba casado y tenía cuatro hijos de edades comprendidas entre los 22 y los 15 años.


De acuerdo con el Real Decreto 1404/2000, con fecha 19 de julio de 2000, se le concedió la Gran Cruz de la Real Orden de Reconocimiento Civil a las Víctimas del Terrorismo a título póstumo. Además, en resolución fechada el 18 de marzo de 2005 (Real Decreto 308/2005), el Ministerio del Interior le concedía también el ascenso de empleo, con carácter honorífico y a título póstumo.

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