29 DE MARZO DE 1980. AZCOITIA (GUIPÚZCOA) JOSÉ MARÍA PIRIS CARBALLO.
José María Piris Carballo.
En torno al mediodía del 29 de marzo de 1980, el niño JOSÉ MARÍA PIRIS CARBALLO, de 13 años, fallecía en la calle Zarauz de Azcoitia (Guipúzcoa), tras darle una patada a una bolsa de deportes, que se encontraba abandonada en la calle y que contenía una carga explosiva oculta. La bomba-lapa se había desprendido de un vehículo propiedad de un miembro de la Guardia Civil a quien se la había colocado, en los bajos de su coche particular, un comando de la siniestra organización ETA.
José María y dos amigos, Fernando García López y Jesús María Vega, regresaban de jugar un partido de fútbol y caminaban por una calle de Azcoitia cuando vieron un paquete que les pareció curioso y que resultó ser una bomba. La explosión provocó la muerte en el acto del José María e hirió de suma gravedad a Fernando García López, de 12 años. El tercer amigo, Jesús María Vega, resultó ileso.
El artefacto había sido colocado por un comando de ETA en los bajos de un vehículo propiedad de un el coche de un guardia civil domiciliado en las inmediaciones. El agente puso en marcha su vehículo y el paquete que contenía la bomba cayó al suelo sin que hiciera explosión y sin que el conductor se percibiera de ello. El paquete quedó en el suelo hasta que José María Piris le dio la patada.
El 30 de abril de 1986 fueron juzgados varios terroristas como autores del atentado. La Audiencia Nacional condenó a Francisco Fernando Martín Robles, Jon Aguirre Aguiriano y Jesús María Zabarte Arregui a 23 años de prisión mayor y a otros 7 años por las lesiones sufridas por Fernando. Posteriormente, el 29 de noviembre de 1988, la misma sección dictó otra sentencia, en la que se condenaba también a José Gabriel Urizar Murgoitio a la misma pena.
Jon Aguirre Agiriano, José Gabriel Urizar Murgoitio, Francisco Fernando Martín se trasladaron a Azkoitia la noche del 28 al 29 de marzo y colocaron el explosivo en el vehículo del guardia civil, según consta en la sentencia de la Audiencia Nacional por la que Urizar fue condenado a 30 años de prisión.
Urizar fue uno de los beneficiados por la anulación de la retroactividad de la doctrina Parot por parte del Tribunal Europeo de Derechos Humanos y salió de la cárcel el 14 de enero de 2014 tras pasar casi 29 años en prisión.
Jesús María Zabarte Arregui, el carnicero de Mondragón, implicado en 17 asesinatos, por lo que fue condenado a pasar 618 años y 12 días en la cárcel. Recuperó la libertad en noviembre de 2013.
En octubre de 1997, Francisco Martín Robles, era excarcelado tras cumplir 16 años de prisión. Martín Robles, natural de Mondragón (Guipúzcoa), estaba condenado a penas que sumaban varios cientos de años de cárcel por cinco asesinatos. Fue excarcelado en aplicación del artículo 70 del antiguo Código Penal, ya que había cumplido las tres cuartas partes de la máxima pena (30 años),
En mayo de 2011, el etarra Jon Aguirre Aguiriano 'Elurtxuri' era puesto en libertad tras haber cumplido treinta años de prisión efectiva por tres asesinatos. Aguirre, que se encontraba en la prisión de Basauri, era el primer miembro de ETA que cumplía el máximo tiempo previsto en el Código Penal en aplicación de la 'doctrina Parot, que sería derogada por el Tribunal de derechos humanos de Estrasburgo en 2013. Fue recibido como un héroe por sus vecinos de Mondragón, saliendo a saludar a la terraza de su piso en la localidad guipuzcoana.
José María Piris Carballo, tenía 13 años de edad, era natural de San Vicente de Alcántara (Cáceres). Su familia, vivía a en Vascongadas, desde hacía siete años, trabajando su padre en la empresa Forjas de Azcoitia.
De acuerdo con el Real Decreto 1404/2000, con fecha 19 de julio de 2000, se le concedió la Gran Cruz de la Real Orden de Reconocimiento Civil a las Víctimas del Terrorismo a título póstumo.