3 DE MAYO DE 1984. OYARZUN (GUIPÚZCOA) ÁNGEL RODRÍGUEZ SÁNCHEZ. MECÁNICO.
Ángel Rodríguez Sánchez.
En la tarde del jueves 3 de mayo de 1984, el cuerpo sin vida de ÁNGEL RODRÍGUEZ SÁNCHEZ, de propietario de un taller y de una grúa en Irún, aparecía muerto, con dos disparos en la cabeza, en la carretera que unía esta localidad con Oyarzún.
El suceso se descubrió después de que una persona desconocida llamara al domicilio de Ángel Rodríguez e informara a su esposa de que la grúa propiedad de la víctima se encontraba abandonada en dicho lugar y con la radio conectada.
La esposa avisó del hecho a la Policía Municipal de la villa, que desplazó a una patrulla del cuerpo para comprobar la información.
En el kilómetro 16 de la carretera Irún-Oyarzún, en el barrio de Las Ventas, localizaron, a unos 30 metros de la calzada y entre dos fardos de paja, el cuerpo de Ángel Rodríguez, que se encontraba boca abajo y rodeado de un charco de sangre con dos disparos uno en la sien izquierda, con salida por la sien derecha, y otro a la altura del cuello con la bala alojada en su interior, que le produjeron la muerte prácticamente en el acto. La Guardia Civil encontraría dos casquillos marca Geco. El cadáver fue trasladado, poco antes de las siete de la tarde, al depósito del cementerio de Irún, después de que el juez ordenara su levantamiento.
Sobre las diez y media de la mañana, Ángel Rodríguez recibió en su taller, situado en Irún, una llamada telefónica requiriendo los servicios de su grúa para una reparación urgente de un vehículo, que se había averiado en la zona de Las ventas y que necesitaba reparar para continuar viaje. A llegar se encontró con dos terroristas que, tras encañonarle, le obligaron a desplazarse a una zona menos transitada, donde le asesinarían.
Por el asesinato de Ángel Rodríguez, en 1986 la Audiencia Nacional condenó a sendas penas de 27 años de reclusión mayor a los etarras Francisco Barrenechea Varela e Ignacio Mendiburu Iturain.
En 1992, Barrenechea Varela con una condena acumulada de 45 años, alcanzaba el tercer grado penitenciario para posteriormente salir en libertad. Tan solo había cumplido ocho años de cárcel.
Por su parte, en 1997, Mendiburu Iturain, salió en libertad por enfermedad, tras cumplir 13 años de reclusión.
Ángel Rodríguez Sánchez, de 42 años de edad, era natural de Villafranca de Barros (Badajoz), aunque residía en Irún desde 13 años antes de ser asesinado. Propietario de un taller mecánico y de una grúa, estaba casado con Rosa y tenía tres hijos de 15, 13 y 8 años. Tres días después, el 6 de mayo, - el 6 de mayo, ETA reivindicó el asesinato y acusaba a Ángel de estar relacionado con los GAL, a los que, según la banda terrorista, había proporcionado escondite de vehículos y armas.
De acuerdo con el Real Decreto 1404/2000, con fecha 19 de julio de 2000, se le concedió la Gran Cruz de la Real Orden de Reconocimiento Civil a las Víctimas del Terrorismo a título póstumo.
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