7 DE NOVIEMBRE DE 2001 GUECHO (VIZCAYA) JOSÉ MARÍA LIDÓN CORBI. MAGISTRADO DE LA AUDIENCIA PROVINCIAL DE VIZCAYA.
José María Lidón Corbi. Magistrado de la Audiencia Provincial de Vizcaya.
El 7 de noviembre de 2001, la banda terrorista ETA asesinaba a tiros en Guecho (Vizcaya) al magistrado de la Audiencia Provincial de Vizcaya JOSÉ MARÍA LIDÓN CORBI.
Sobre las 7.30 horas de la mañana, Lidón Corbi abandonó su domicilio acompañado por su esposa, Marisa Galarraga, a la que pensaba llevar hasta el colegio de Bilbao en el que trabaja como profesora, y uno de sus hijos, Íñigo, de 20 años y estudiante de Derecho. Los tres bajaron al garaje del edificio, situado en la confluencia de las calles María Andresena y Euskal Herria de Guecho.
Mientras el matrimonio subía a un Nissan Almera de color blanco, el hijo tomó su propio vehículo y, tras despedir a sus padres con un gesto, enfiló la salida del aparcamiento.
En ese momento, dos desconocidos que actuaron a cara descubierta se acercaron al coche del magistrado: uno de ellos se situó frente al coche, mientras que el segundo se aproximó por la parte izquierda del turismo y abrió fuego. El juez fue alcanzado por tres impactos, uno de ellos en la nuca. La esposa de Lidón Corbi, resultaría ilesa. El hijo del magistrado, que conducía su propio coche justo delante del de su padre presenció también el atentado a través del espejo retrovisor. Inmediatamente salió del coche en auxilio de su padre que aún se encontraba con vida. Iñigo gritó desesperadamente varias veces “que venga alguien, que venga alguien”. La esposa de Lidón, Marisa Galarraga se abrazó a su marido inerte. Los servicios médicos de urgencia, a su llegada, sólo pudieron certificar la muerte del magistrado y dar cuenta al juez de guardia. Tuvieron que arrancar a Marisa Galárraga del cadáver de su marido, al que se mantuvo aferrada presa de una severa crisis nerviosa.
Los asesinos salieron a pie del garaje. Los agentes de la Ertzaintza que se hicieron cargo de la investigación del asesinato, recogieron en el lugar del atentado cinco casquillos de bala.
La capilla ardiente quedó instalada esa misma tarde en el Palacio de Justicia de Bilbao. El lendakari, Juan José Ibarretxe, el ministro de Interior, Mariano Rajoy, el delegado del Gobierno en el País Vasco, Enrique Villar, y el portavoz del Partido Nacionalista Vasco, Joseba Egibar, entre otras autoridades, así como numerosos miembros de la judicatura, acudieron a dar el pésame la familia.
El presidente del gobierno José María Aznar no asistió al funeral, decisión que causó cierta polémica. El ministro de la Presidencia, Juan José Lucas, que el presidente del Gobierno, José María Aznar, no había acudido al funeral de José María Lidón, por velar por su seguridad y no por un conflicto de protocolo. Sin embargo, el propio ministro reconoció que una de las razones que motivó la ausencia fue que el presidente no tenía un lugar concreto para estar.
A título personal asistiría al funeral el ministro de Justicia, Ángel Acebes. Después del funeral, una gran manifestación recorrió las calles de Guecho para protestar por el asesinato de José María Lidón. Los restos mortales del magistrado fueron incinerados al día siguiente por la mañana en el crematorio del cementerio de Derio en una ceremonia privada.
El 15 de noviembre, en un comunicado enviado al diario Gara, la banda terrorista ETA reivindicaba el asesinato de José María Lidón, señalando “que era un atentado contra el aparato de Justicia española y los jueces españoles que castigan sin piedad a los combatientes vascos no tienen un espacio de impunidad en Euskal Herria".
Tras muchas investigaciones se conoció que los asesinos de Lidon Corbi habían sido los etarras Hodei Galárraga Irastorza y Egoitz Gurrutxaga Galarza, que morían en septiembre de 2002 cuando les explotó la bomba que transportaban en un vehículo por las calles de Bilbao, no pudiendo ser juzgados por el asesinato del magistrado.
Otro colaborador y chivato de la banda asesina marxista y antiespañola, Orkatz Gallastegi Sodupe, quien facilitaría la información necesaria para asesinar a Jose Maria Lidon, fue condenado en 2005 por a Audiencia Nacional a 26 años de prisión como responsable de un delito de asesinato terrorista.
En 2022 Orkatz Gallastegi, hermano de Irantzu Gallastegi Sodupe, pareja de Francisco Javier García Gaztelu, “Txapote”, uno de los etarras con mayor número de crímenes, era trasladado a una cárcel de Vascongadas.
José María Lidón Corbi, tenía 50 años de edad, había nacido en Gerona. A los 17 años se fue a vivir a Vascongadas para estudiar la carrera de Derecho en la Universidad de Deusto. Allí conoció a la que sería su mujer, María Luisa Galárraga, natural de Baracaldo. Tras la boda, el matrimonio, fijó su residencia en Vizcaya. Tenían dos hijos, de 23 y 21 años. Magistrado de la Audiencia Provincial de Vizcaya, José María era catedrático de Derecho Penal en la Universidad de Deusto, donde impartía clases desde hacía treinta años. También era profesor en la Academia de la Policía Municipal de Bilbao.
De acuerdo con el Real Decreto 1404/2000, con fecha 19 de julio de 2000, se le concedió la Gran Cruz de la Real Orden de Reconocimiento Civil a las Víctimas del Terrorismo a título póstumo.
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