8 DE MAYO DE 2000. VIGO. GONZALO TORRES LAGE, JESÚS SOBRAL OTERO. VIGILANTES DE SEGURIDAD.
Gonzalo Torres Lage. Vigilante de Seguridad.
En la mañana del 9 de mayo de 2000, un comando de la banda terrorista GRAPO, formado por tres hombres y una mujer, que actuaron a cara descubierta, hacia detonar en Vigo siete artefactos explosivos en un tramo de 70 metros e intercambiaron 100 disparos con los vigilantes jurados de un furgón blindado de la compañía de Seguridad PROSEGUR, que trasladaba 327 millones de pesetas destinados a un organismo oficial de Pontevedra, desde su sede situada en San Pedro de Sárdoma, en Vigo, a un kilómetro del lugar donde se produjo el atentado.
Jesús Sobral Otero Vigilante de Seguridad.
En el asalto fallecería los vigilantes GONZALO TORRES LAGE, de 60 años conductor del furgón, hiriendo también de muerte al copiloto, JESÚS SOBRAL OTERO, que fallecía instantes después del asalto, en el hospital General de Vigo
El furgón blindado circulaba a las 7.45 de la mañana por la carretera provincial en dirección a Pontevedra, a la altura del cruce con la Tercera Travesía de dicho vial.
Un primer artefacto explosivo estaba situado encima de un vehículo Volkswagen Polo de color rojo. Otra bomba estalló debajo del vehículo al paso del furgón. La onda expansiva destrozó los cristales del establecimiento y del edificio situado enfrente, en el número 38 de la calle, así como numerosos turismos que estaban estacionados. Las explosiones hicieron que el conductor del furgón perdiese el control y el vehículo rascase la carrocería de un Peugeot 306 que estaba aparcado en el vial mientras su propietario desayunaba en una cafetería cercana antes de ir al trabajo.
El furgón prosiguió su marcha descontrolado mientras el conductor Gonzalo Torres intentaba frenar. Le esperaban otras bombas situadas debajo de un contenedor, frente al número 30. Sin embargo, estos explosivos no llegaron a estallar.
Mientras tanto, los terroristas recorrían la acera, desde la Tercera Travesía, armados con pistolas y un fusil automático. Al llegar al vehículo hicieron estallar otra bomba-lapa en el frontal. El conductor, Gonzalo Torres, y el copiloto, Jesús Sobral, salieron al exterior repeliendo el asalto mientras eran acribillados a balazos.
Al conductor del vehículo lo remataron en el suelo, frente al mesón Lambada, donde se encontraba en ese momento el propietario del mismo, Lino Veiga, y diez clientes que acudieron a refugiarse en el cuarto de baño del establecimiento, ante el nutrido e incriminado tiroteo, que llegó a alcanzar a uno de los atracadores.
Un tercer guarda de seguridad logró salvar su vida, Manuel Espada, viajaba en la parte trasera del furgón, en un compartimento estanco junto al dinero. Su primera reacción fue salir del coche, pero en cuanto recibió el primer balazo, que le alcanzó el brazo izquierdo, optó por cerrar la puerta acorazada y encerrarse junto a la caja fuerte. De esta forma logró salvar su vida.
Los asaltantes lograron apoderarse de alguna de las sacas con monedas pero tuvieron que abandonarlas en la huida, como también otra mochila con cuatro bombas lapa y varios detonadores.
Los terroristas regresaron a pie hasta la Tercera Travesía de la carretera provincial donde tenían un coche, un Opel Kadett gris en el que huyeron, y que aparecía horas después abandonado en el Campo da Senra de Sárdoma, con manchas de sangre en su interior.
Los miembros del GRAPO Israel Torralba y Marcos Martín eran identificados como autores de aquel atentado terrorista. En febrero de 2006 Israel Torralba fue detenido en Bilbao. Martín Ponce caía en julio de 2002 en París. Ambos terroristas serán juzgados por los asesinatos de Gonzalo Torres y Jesus Sobral. Junto a ellos se sentarían en el banquillo los también miembros del GRAPO, Fernando Silva Sande, Mónica Refojos, Esther González, así como al líder histórico de la organización, Manuel Pérez Martínez, 'camarada Arenas', que habría ordenado aquel asalto, y el jefe del aparato de falsificación de la banda, José Luis Elipe.
Silva Sande, Israel Torralba, Marcos Martín Ponce y Mónica Refojos, serían condenados en 2010, a 135 años de prisión por delitos de robo con intimidación, asesinato terrorista, lesiones, estragos y tenencia de explosivos y eran absueltos del de pertenencia a organización terrorista por haber sido ya juzgados por ello.
Esther González fue condenada a 144 años de cárcel, acusada de los mismos delitos que sus compañeros, además del de pertenencia a banda armada. La Audiencia Nacional absolvía a Manuel Pérez Martínez, "camarada Arenas" y a José Luis Elipe López.
Martín Ponce, se encuentra en prisión desde el 23 de diciembre de 2006 y su condena asciende a 77 años y seis meses por delito de atentado y asesinatos, robo con violencia y colaboración con banda armada. Cumple condena en el penal de Campos del Río (Murcia)
Israel Torralba, Mónica Refojos y Esther González continúan cumpliendo condena.
En 2023, Fernando Silva Sande, máximo dirigente del GRAPO, alcanzaba el tercer grado penitenciario, tras ser condenado a más de cien años de cárcel, por diversos atentados y cumplir solo 18. Lo cumple en el centro Carmela Arias de La Coruña. Fue expulsado de la banda terrorista.
Gonzalo Torres Lage, tenía 60 años de edad. Su compañero, Jesús Sobral Otero, 28.
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